Entrevista a Esteban, Hijo de desparecido.
Abstract
Esteban al momento de la entrevista tiene 22 años. Nació el 16 de marzo de 1974. Tiene 2 hermanos Sebastián y Federico, producto de un matrimonio anterior de su madre. A sus papás, militantes de Montoneros, los secuestran en 1977 cuando él tenía 3 años y medio. A Esteban lo llevaron a vivir con sus abuelos a Capital y a sus 10 años regresaron a La Plata. Cuando secuestran a sus padres ellos quedaron con unos vecinos que les avisaron a sus abuelos. Para él la incorporación a HIJOS en 1995 marca un quiebre en su vida; dice que hasta ese momento no preguntaba por sus padres y que solo “escuchaba sin preguntar lo que sus abuelos le contaban”. ¿ Cuenta que no tiene mucha información sobre lo que pasos con sus padres. Que tampoco recuerda mucho las cosas vividas con ellos y que ha tenido la oportunidad de encontrarse solo con un compañero de militancia de ellos. Habla de unas cartas que tiene la familia que mandó su madre mientras estaba detenida. Dice que hace solo dos años tomo consciencia de que era hijo de desaparecido gracias a su participación en la organización HIJOS. Cuenta que nunca vivió con sus hermanos, que casi no los conoce porque cuando desaparece su mamá el padre de los otros niños se los lleva a vivir con él y no deja que lo vean; que casi no los conoce. Reconstruye el nacimiento de HIJOS: el homenaje en la Facultad de Arquitectura, el campamento en Córdoba, el armado de comisiones de trabajo, las discusiones en torno al escrache, quienes debían integrar o no HIJOS. Cuenta de la división de la organización en dos grupos diferentes y como eso rompió un poco la esencia que venían construyendo en la organización. Cuenta que ellos como organización e individualmente están identificados por la policía y por “los servicios”. Dice que él no tiene miedo. Con respecto a las declaraciones de Scilingo, para él no fue muy relevante pero sí le pareció acertado hacerlo por televisión para que la gente se entere. Fue su tío, que estaba exiliado en España, quien le contó sobre la militancia de sus padres; nadie de la familia lo había hecho. Solo le hablaban de cómo eran, pero no de su participación política. Cuenta que no hizo amigos en la secundaria, que solo eran compañeros. Dice que escribe para él, para acordarse: “De datos sobre mis viejos, para no olvidarme porque me olvido de todo, me olvido de todo”. Esteban cree que es el tiempo de las nuevas generaciones, que “hay que ver lo que paso históricamente para no cometer los mismos errores” destaca que hay un lenguaje particular y propio de HIJOS con respecto las Madres y a las Abuelas de Plaza de Mayo. Le muestra a la entrevistadora una bolsa con cartas y objetos sobre sus padres y documentación presentada por sus familiares. Se describe documentación. Cuenta que sus padres pudieron sacar cosas para enviárselas a sus familiares mediante un militar que hacía de nexo. Habla de las indemnizaciones y su posición al respecto. Cuenta cuáles son sus miedos, sueños y esperanzas.